La psicología de la conducta es una rama de la psicología que se centra en el estudio de los fenómenos psicológicos y la conducta humana. En este artículo, exploraremos los conceptos clave de la psicología de la conducta y cómo se define y estudia este fenómeno.
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Definición de la conducta según José Bleger
Para comprender la psicología de la conducta, es importante entender cómo se define la conducta. José Bleger, un reconocido psicólogo argentino, adopta la definición de conducta propuesta por Lagache, quien la define como el conjunto de respuestas significativas por las cuales un ser vivo en una situación integra las tensiones que amenazan la unidad y el equilibrio del organismo. Esto significa que la conducta es la forma en que los seres vivos, incluidos los humanos, responden a las tensiones y desafíos que enfrentan en su entorno.
La conducta tiene una finalidad, que es resolver las tensiones y mantener la integridad y el equilibrio del organismo. Por ejemplo, si una persona tiene sed, su conducta será buscar agua para satisfacer esa necesidad. La conducta implica un conflicto entre diferentes necesidades o deseos, y la persona debe tomar decisiones para resolver ese conflicto.
Áreas de la conducta según Bleger
Según Bleger, la conducta se manifiesta en tres áreas principales: el área de la mente, el área del cuerpo y el área del entorno externo. Estas tres áreas están interrelacionadas y coexisten en todas las manifestaciones de la conducta.
Por ejemplo, cuando una persona está pensando en algo (área de la mente), su cuerpo también está presente y puede experimentar sensaciones físicas como el hormigueo en una pierna (área del cuerpo). Además, la conducta siempre ocurre en un contexto específico (área del entorno externo), como un aula de clase o cualquier otro entorno en el que se encuentre la persona.
El campo de la conducta
El campo de la conducta se refiere al entorno o contexto en el que ocurre la conducta. Este campo se divide en dos subestructuras: el campo ambiental o geográfico y el campo psicológico.
El campo ambiental se compone de los elementos, condiciones y sucesos que forman parte del entorno físico y social en el que se desarrolla la conducta. Por ejemplo, el aula de una clase sería un campo ambiental en el contexto de la conducta de los estudiantes.
El campo psicológico, en cambio, se refiere a la estructura particular que el individuo tiene en un momento dado dentro del campo ambiental. Esta estructura incluye la conciencia y la configuración personal del entorno. Es decir, cada persona percibe y experimenta el campo ambiental de manera única y subjetiva.
Ámbitos de la conducta
Además de las áreas de la conducta, Bleger también identifica tres ámbitos diferentes en los que se manifiesta la conducta: el ámbito psicosocial, el ámbito sociodinámico y el ámbito institucional.
El ámbito psicosocial se centra en el estudio de un individuo en sí mismo, considerando todos sus vínculos y relaciones interpersonales. Es el estudio de la conducta individual y cómo se relaciona con su entorno social.
El ámbito sociodinámico, por otro lado, se enfoca en el estudio del grupo como una unidad, en lugar de analizar a cada individuo por separado. Se centra en cómo los grupos influyen en la conducta de sus miembros y cómo se desarrollan dinámicas sociales dentro de ellos.
Finalmente, el ámbito institucional se refiere a las relaciones entre grupos y las instituciones que los regulan. Examina cómo las instituciones sociales, como la familia, la escuela o el trabajo, influyen en la conducta de las personas y cómo se establecen normas y roles dentro de estas instituciones.
Niveles de integración en la conducta
La psicología de la conducta se ocupa de estudiar la conducta en su nivel más alto de integración. Esto implica considerar todas las áreas y aspectos de la conducta, incluidos los niveles físico-químico, biológico y social.
La conducta siempre es un fenómeno psicológico, social, biológico y físico-químico al mismo tiempo. Por lo tanto, es necesario abordar su estudio desde distintas perspectivas y niveles de integración.
El nivel psicológico de integración es el nivel más complejo y completo, ya que abarca todos los aspectos de la conducta humana. En este nivel, se considera la intencionalidad y la cognición, es decir, la capacidad de la mente para pensar y planificar acciones.
La conducta en el nivel psicológico de integración se conoce como conducta molar. Esta conducta se caracteriza por ser intencional, cognitiva y significativa socialmente. Es la manifestación total de un individuo como ser humano en un contexto sociocultural.
En contraste, la conducta molecular se refiere a los elementos subyacentes fisiológicos y físicos de una respuesta individual, como un simple movimiento de un brazo.
Finalidad de la conducta
La conducta tiene una finalidad, que es resolver las tensiones y mantener el equilibrio del organismo. Cuando una persona realiza una conducta, busca descargar tensiones y satisfacer sus necesidades. La conducta es una forma de adaptación al entorno y de preservar la integridad y la consistencia del individuo.
La psicología de la conducta se centra en el estudio de los fenómenos psicológicos y la conducta humana. José Bleger propuso conceptos clave como las áreas de la conducta, el campo de la conducta, los ámbitos de la conducta y los niveles de integración. Comprender estos conceptos nos permite analizar y comprender la conducta desde diferentes perspectivas y niveles, lo que contribuye a una visión más completa de la psicología de la conducta.